De: Ivan Pittaluga
Fecha: 24 de mayo de 2009Asunto: Campaña mediática
Estimado Padre:
Me dio vergüenza leer en LA NACION un extensísimo artículo que no aporta nada, salvo tratar de cargar las tintas para condicionar a la opinión pública (y a los jueces) contra Usted.
Sin duda, querido Padre, tiene enemigos muy poderosos... pero Dios es más poderoso.
Rezo por usted, para que Dios lo conforte en estos duros momentos. Nunca dudé de su inocencia y menos ahora, que el enemigo muestra el plumero de su obsesión por atacarlo y con él, al sacerdocio y a la Iglesia.
Pido a la Virgen que lo proteja y lo cuide, y le haga sentir especialmente su maternal cariño.
Un abrazo
Estimado Padre:
Me dio vergüenza leer en LA NACION un extensísimo artículo que no aporta nada, salvo tratar de cargar las tintas para condicionar a la opinión pública (y a los jueces) contra Usted.
Sin duda, querido Padre, tiene enemigos muy poderosos... pero Dios es más poderoso.
Rezo por usted, para que Dios lo conforte en estos duros momentos. Nunca dudé de su inocencia y menos ahora, que el enemigo muestra el plumero de su obsesión por atacarlo y con él, al sacerdocio y a la Iglesia.
Pido a la Virgen que lo proteja y lo cuide, y le haga sentir especialmente su maternal cariño.
Un abrazo