De: Carmen Anaya
Fecha: 25 de marzo de 2009Asunto: Apoyo incondicional
Querido Padre Julio:
Termino de leer el comentario referido al Hogar "Felices los Niños" de Chacarita. Pienso que Carlos De Elía así como los articulistas de Página l2 no han perdido la vergüenza, sino que jamás la tuvieron. Tienen el descaro de seguir atacándolo cuando en corto tiempo toda la verdad quedará develada y todo el mundo sabrá que Ud. es la persona más buena y honrada del mundo. Después de la presentación de todos los testimonios no habrá la menor duda que los jueces fallarán a su favor. No sé como se arreglarán para emitir la información al repecto. No se olvide que Dios no lo abandona, que tanto dolor producirá abundantes frutos, que María lo sostiene con su mano y que su Angel de la Guarda lo acompaña para que no desfallezca en su duro caminar.
Hoy, día de la Anunciación del Angel a la Santísima Virgen nos recuerda que al aceptar la voluntad de Dios ella tuvo que sufrir durante toda su vida, y su dolor no fue estéril, tampoco lo será el suyo.
Con muchísimo afecto quiero ayudarlo a llevar su cruz.
Carmen
Querido Padre Julio:
Termino de leer el comentario referido al Hogar "Felices los Niños" de Chacarita. Pienso que Carlos De Elía así como los articulistas de Página l2 no han perdido la vergüenza, sino que jamás la tuvieron. Tienen el descaro de seguir atacándolo cuando en corto tiempo toda la verdad quedará develada y todo el mundo sabrá que Ud. es la persona más buena y honrada del mundo. Después de la presentación de todos los testimonios no habrá la menor duda que los jueces fallarán a su favor. No sé como se arreglarán para emitir la información al repecto. No se olvide que Dios no lo abandona, que tanto dolor producirá abundantes frutos, que María lo sostiene con su mano y que su Angel de la Guarda lo acompaña para que no desfallezca en su duro caminar.
Hoy, día de la Anunciación del Angel a la Santísima Virgen nos recuerda que al aceptar la voluntad de Dios ella tuvo que sufrir durante toda su vida, y su dolor no fue estéril, tampoco lo será el suyo.
Con muchísimo afecto quiero ayudarlo a llevar su cruz.
Carmen